Una boda es un momento único e irrepetible en la vida de una pareja. No sólo es un evento legal. Es decirle al mundo, y más concretamente a la familia y amigos invitados, que os quereis y que estais dispuestos a compartir vuestra vida uno junto al otro. Y este día debería ser uno de los más felices de vuestra vida.
Organizar una boda es sencillo: buscas fecha en el juzgado o iglesia, buscas un restaurante, invitas a la familia y a los amigos... y poco más. Pero crear "LA BODA" es algo más complicado.
Cada vez són más las parejas que desean que el día de su boda sea recordado no sólo por ellos mismos, sino por todos los que asistieron a ella. Y para conseguirlo hay que prestar mucha atención a ciertos detalles que harán que su boda sea diferente y especial.
Para que esto sea posible, los novios deben dedicar mucho tiempo a organizar ese día: buscar fecha, encargarse del papeleo, encontrar el lugar indicado, hacer la lista de invitados, preparar las invitaciones, buscar los detalles, probar menús,... Y todo esto sin dejar su trabajo y sin dejar de disfrutar de ellos mismos!
Pues bien, para esto existe la figura del Wedding Planner (Organizador de boda).
Aunque los "wedding planners" son originarios de EEUU, cada vez están más de moda en nuestro país. Ellos son los que se encargan de crear, organizar y coordinar el evento, siempre bajo la supervisión de los novios. Para que nos entendamos, el Wedding Plannner se encarga del "trabajo sucio", para que los novios puedan disfrutar de los preparativos y conseguir hacer realidad la boda de sus sueños.
Una buena Wedding Planner será capaz de conseguir todo aquello con lo que sueñas, por muy extravagante que sea. Se encargará de diseñar la boda, buscar y reservar el mejor lugar para ello, la decoración, las flores, la iluminación, la comida, la musica, transporte de invitados, hoteles... Mimará y pulirá cada detalle para que todo sea de vuestro gusto, y lo más importante, sin que todo esto afecte a vuestro presupuesto.
La Wedding Planner puede engargarse de la organización de todo el evento, o sólo de ciertos aspectos concretos, como la busqueda del lugar, el alquiler de material, la decoración del baquete... O incluso puede simplemente coordinar el día de la boda: la pareja organiza el evento, y pone todo el trabajo realizado en manos de la wedding planner para poder disfrutar sin preocupaciones el día de la boda.
Sin duda, contratar una Wedding Planner, ya sea para la organización integral, la coordinación del evento,o sólo para ciertos temas, es la mejor opción para conseguir la boda de tus sueños, evitando los nervios, el estrés y los problemas que puedan surgir, ahorrando tiempo e incluso dinero.
Si deseas más información sobre los servicios que Wedding Dreams puede ofrecerte, escribenos a weddingdreams@hotmail.es
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